Las Eunucadoras. Capítulo 0

¿Que dónde hemos estado todo este tiempo? Perpetrando ESTO

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Chueca, 02:30 am. Lugar: El F5

Música, bolleras, alcohol y estrógenos. Tres bollos están a punto de descubrir su fatal destino. Una maldición se cierne sobre ellas sin q lo sospechen siquiera...
¡¡CHAN CHAN CHAN!!

Coquí se fija en la dj y se acerca a ella hipnotizada por sus pezones que, bajo la camiseta, apuntan directo a su corazón

- Hola... te quería pedir una cosa... me pones - dice Coquí alargando las "s" dejando salir todo su erotismo y peste a alcohol - ¿me pones... "mi carro me lo robaron"?
- ¿Qué?
- Sí... de noche cuando dormía
- ¿Cómo?
- Cómo no sé, tú eres la dj. Habrá que darle a algún botoncito de esos
- ¿Vas de graciosa?
- No... voy como una moto, ¿me montas?

Y en ese preciso momento, Coquí comienza a perder el control de sus brazos, de sus manos... ¡ de sus dedos!

- ¡Oh Dios mío, ¿qué me ocurre?! ¡¿Qué es esto?! - exclama preocupada. Sus falanges comienzan a formar una oscura figura... ¡la mariposa!
- ¿Qué haces, chalada? - pregunta la dj con miedo

Coquí, sin saber cómo, nota que sus brazos no la obedecen y se dirigen sin su permiso hacia el tesorito de la dj. Grita espantada, y con sus brazos aún en esta extraña posición, sale corriendo hacia el baño aún con los brazos en alto


Mientras tanto, en otro rincón del F5, Ox medita sobre su color de uñas y con qué chica del bar hace juego. Encuentra con la mirada una jipilondia perfecta para su color alternativo de esa noche
- Perdona - le dice - ¿ese pañuelo es de Gucci?
- No tronca, te juro que es mío
Embriagada por la finura de sus maneras, Ox decide pasar a la acción
- Hum... ¿ves algo que pueda darte a cambio del pañuelo?
- No tía, que si no dónde me limpio los mocos...
- Ven que te voy a dejar yo limpia...

Y en ese instante sucedió. Una fuerza inconmensurable se adueñó de su elocuencia...
- Qué falta te hace, ¡¡so guarra!! - dijo llevándose las manos a la boca
- ¡Madre mía!¿He dicho yo eso? ¿Qué me ocurre? - pensó para sus adentros
- ¡Pero tú de qué vas, subnormal!
- Yo me voy antes de que me pases tus ladillas...
Ox se llevó de nuevo las manos a la boca intentando frenarse, pero viendo que era imposible callarse, y que su integridad corría peligro, salió escopetada buscando el mingitorio


Al mismo tiempo, en la esquina más oscura del ya famoso F5...

Desgra había quedado con el último pivón que había conocido a través de la red de redes: chueca.com. La foto no le hacía justicia y Desgra se hacía la dura porque la ya-no-desconocida era muy frágil... ¡estaba que se rompía de buena!
Ya-no-desconocida decidió pasar a la acción. Se acercó para dejar su copa en la barra dejando ver su "canalillo de Suez"

- Desgra... espero no parecerte atrevida pero... ¿tienes alergia al polvo?
- No... ¿por?
- Porque esta noche quiero echarte 3 ó 4
Desgra sonríe confiada, pero ¡quiere más!
- Vas a tener que prometerme algo más...
- Hum... no se me ocurre nada
- Vale, - dice Desgra - sólo quería hacerme la interesante. ¿Vamos a tu casa o al descampao de atrás?

Pero justo entonces su cuerpo empieza a convulsionarse, el epicentro de ese seísmo viene justo de su ombligo

- ¡Uh...!
- ¿Qué ocurre? - pregunta ya-no-desconocida flipando
- Nada... ¡la emoción! - intenta disimular sin éxito
- ¡¿Qué haces?!
- ¿Bailar como "chakira"?
- Desgra... me estás dando miedo
- Es que me ha dado un tic - dice nuestra pequeña desgraciada notando que su camiseta se va subiendo y su vientre lucha por salir a la luz entre movimientos arrítmicos parecidos a los de una sardina recién pescada.

Viendo su imposibilidad para controlar el terremoto, Desgra decide excusarse.

- Ahora vuelvo... voy a empolvarme la nariz ¡No te vayas!

Desgra se abre paso entre las bolleras al grito de "¡¡Abrid pasoooo!!". Baja las escaleras del baño y se encuentra con la interminable cola de costumbre. Decide hacer lo más inteligente en un bar bollo; ir al lugar menos transitado: el baño de tíos. Sólo queda una puerta abierta de los tres aseos... y ahí que va, empujando la puerta con la barriga


De fondo se escuchan unos lamentos... nuestras tres desgracias están a punto de conocerse. Sin poderse contener, gritan al unísono

- ¡Puta desgracia!
Y se hace el silencio. Sorprendidas, miran hacia los lados. No esperaban ningún grito femenino alrededor.

Poco a poco, como las comadrejas asoman el hocico de sus madrigueras, salen cautelosas...

Coquí empuja la puerta aún con las manos unidas en extraña posición. Desgra avanza con la barriga por delante. Y Ox exclama al verlas

- ¿De verdad sois así o es que lleváis careta?
- Cállate puta, ¡y ayudadme! ¡¡No puedo despegar las manos!! - grita Coquí
- Ay perdón - consigue decir Ox - No sé qué me pasa, no puedo controlar lo que digo... Creo que tengo un aneurisma o algo
- Yo estoy peor, - dice la Desgra - mi barriga es epiléptica
Las tres lloran y gritan consiguiendo llamar la atención de la encargada del ropero que, alarmada, entra a ver qué ocurre
- ¡Ayúdame! - ruega Coquí con los brazos en tensión
- A mí primero, zorras - reclama Ox
- A mí... a mi hazme lo que quieras, guapa - remata Desgra guiñando un ojo y empezando a convulsionar de nuevo
- Jooooder... - dice la "ropera" - Esto yo ya lo he visto antes. Os han echado una maldición bollera
- ¡¿¿Qué??!
- ¡Que sí! Yo de vosotras iría pensando a quién habéis jodido...
- ¿En este último año? - pregunta la Desgra - esto va a ir para largo...
- Pues hasta que no deis con la respuesta y encontréis a los artífices no os vais a comer un torrao
- ¡¿Perdona?! - salta escandalizada Coquí
- Esto les pasó a unas chicas que yo conocía y lo último que sé de ellas es que entraron en un convento. Hasta que no resolváis lo que tenéis pendiente cada vez que os intentéis ligar a una pava os va a pasar lo mismo
- Pero... ¿esto nos lo ha hecho la misma persona? - indaga Coquí
- Eso digo yo, porque a estos dos fetos no los conozco de nada... - dice Ox sorprendida - ¡Uy, perdón! Sigo bajo los efectos de mi aneurisma vudú
- Pues... No es fácil hacer una maldición así, y menos tres a la vez. Esto no lo hace cualquiera - dice la ropera - Pero a saber quién se lo habrá encargado. Deberías hablar entre vosotras a ver qué averiguáis
- Tienes razón. Hola, me llaman Ox


CONTINUARÁ.....

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